Los gobiernos alemán y finlandés debatieron este lunes 18 de noviembre la “guerra híbrida” y la amenaza rusa, diciendo “profundamente preocupado”tras la rotura de un cable submarino de telecomunicaciones que une sus dos países.
“Se está llevando a cabo una investigación exhaustiva” tras esta rotura, cuyas causas aún no han sido aclaradas, de un cable de fibra óptica en el mar Báltico, anunciaron las ministras de Asuntos Exteriores de ambos países, Annalena Baerbock por Alemania y Elina Valtonen por Finlandia, en una declaración conjunta.
“Nuestra seguridad europea no sólo está amenazada por la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania sino también por las guerras híbridas emprendidas por actores malintencionados”estimaron. Para este último, “Un incidente de este tipo despierta inmediatamente sospechas de daño intencionado”.
Cortar todas las conexiones de fibra.
Este cable submarino de 1.172 kilómetros, denominado C-Lion1, une Helsinki con Rostock, un puerto del mar Báltico en el noreste de Alemania, desde 2016.
Su operador, el grupo tecnológico finlandés Cinia, anunció que un » por defecto « había sido detectado el lunes, lo que provocó el corte de todas las conexiones de fibra en este cable.
“Este tipo de ruptura no se produce en estas aguas sin impacto externo”añadió el grupo de propiedad pública.
Los países europeos utilizan cada vez más el término “guerra híbrida” para describir las acciones destinadas a perjudicarlos llevadas a cabo por Moscú desde la invasión de Ucrania en 2022.
El fantasma del gasoducto Nord Stream
Ante el aumento de estos ataques, el ex presidente finlandés Sauli Niinistö pidió la creación de un servicio de cooperación de inteligencia dentro de la Unión Europea, en un informe presentado a la Comisión a finales de octubre.
En octubre de 2023, un gasoducto submarino entre Finlandia y Estonia tuvo que cerrarse tras los daños causados por un ancla de un carguero chino.
¿Qué son estos cables submarinos que están en el centro de toda la atención después de la «sabotaje» gasoductos?
Finlandia ha intensificado el seguimiento de los incidentes en el Mar Báltico desde el estallido de la guerra entre los vecinos Rusia y Ucrania. El incidente del lunes recuerda también el sabotaje ocurrido en septiembre de 2022 al gasoducto ruso Nord Stream en el mar Báltico, que aún no ha sido aclarado.
En agosto, el Wall Street Journal implicó al ex jefe de gabinete ucraniano, acusación descrita como “absoluta tontería” a través de Kyiv.