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El nuevo Obs con AFP
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«No somos belligiosos, no queremos la guerra con Argelia. Argelia nos ataca»dijo este miércoles 19 de marzo, el Ministro del Interior Bruno Retailleau, en Sud Radio, sobre el rechazo de Argel de reanudar a sus nacionales expulsables.
«Argelia no debe baragouine cuando uno esté convencido, con un documento de identidad, un pasaporte, de que el nacional es argelino. Debe readmitirlo»insistió a Bruno Retailleau.
En medio de una crisis diplomática entre los dos países, el Ministro del Interior se declaró «Una respuesta graduada» hacia Argel, argumentando que«Se podría tomar un conjunto de medidas». La respuesta graduada le permite decir: «No somos los agresores»dijo.
«Hemos comenzado a implementarlo con la suspensión de las instalaciones en el argelino Nomenklatura»agregó el ministro, evocando el «Cuestionando los acuerdos de 2007» que permiten a los titulares de pasaportes diplomáticos por no necesitar visa.
Bayrou quiere «denunciar» el acuerdo de 1968, Macron «renegociar»
Argelia se opuso el lunes un final de la inadmisibilidad a la lista de argelinos caros proporcionados por París en los últimos días, reiterando su «Rechazo categórico de amenazas, inclinación de la intimidación, mandato judicial y ultimátums» Viniendo de Francia.
A fines de febrero, el primer ministro François Bayrou había amenazado con «Denunciar» El acuerdo de 1968 que otorga un estatus especial a los argelinos en Francia, el antiguo poder colonial, en términos de tráfico, estadía y empleo, si, dentro de las seis semanas, Argelia no reanudó a sus nacionales en una situación irregular. Sin embargo, a principios de marzo, Emmanuel Macron parecía querer jugar la carta del apaciguamiento diciendo «Favorable, no denunciar, sino renegociar» Este acuerdo.
Cuando se le preguntó sobre su amenaza de renuncia si el gobierno renunciaba a un equilibrio de poder con Argelia, Bruno Retailleau respondió este miércoles que» obviamente «, «Si algún día me encontrara con un obstáculo que podría desafiar la seguridad de nuestros compatriotas, entonces debería preguntarme».
Las relaciones entre Francia y Argelia han seguido deteriorándose desde el reconocimiento en julio por Emmanuel Macron de un plan de autonomía bajo la soberanía marroquí propuesta por Rabat para el Sahara occidental, territorio con estatus no definido según la ONU.