Coste de desarrollo colosal, 1.300 millones de euros recaudados por error… Los contratiempos de la aplicación “Gestionar mi inmueble”

En 2023, los errores en la recaudación de varios impuestos vinculados a los bienes inmuebles -relativos a segundas residencias y viviendas vacías- costaron al Estado 1.300 millones de euros, subraya un informe del Tribunal de Cuentas.


Una nueva tarea en la criticada gestión de Bercy. El Tribunal de Cuentas publicó el jueves 23 de enero un informe que revela los numerosos contratiempos de la aplicación “Gestionar mi inmueble” cuando entre en funcionamiento en 2023. Los múltiples errores, cometidos por propietarios que tributaron incorrectamente, costaron a la administración 1.300 millones de euros .


• Costo de desarrollo triplicado


Lanzada en 2023 tras cinco años de desarrollo, la aplicación “Gestionar mi inmueble” (GMB) está destinada a los propietarios. La idea es enumerar más fácilmente el uso de la vivienda: si está ocupada por el propio propietario, por un inquilino o desocupada. En el contexto de la eliminación del impuesto sobre la vivienda, la solicitud tiene como objetivo distribuir mejor los tres impuestos restantes (el impuesto sobre la vivienda para segundas residencias, el impuesto sobre la vivienda sobre viviendas desocupadas y el impuesto sobre las viviendas desocupadas).



Pero el coste de desarrollar esta aplicación fue mucho mayor de lo esperado. El presupuesto inicial de 12,7 millones de euros se ha triplicado hasta un total de 37,2 millones de euros. “Este exceso se explica en gran medida por el uso masivo de proveedores de servicios externos, por un total de 25 millones de euros, o dos tercios de los gastos indicados”especifica el Tribunal de Cuentas en su informe.


• Campaña fallida


Además de este coste colosal, el informe del Tribunal de Cuentas señala también un “despliegue técnico” de la solicitud que “tuvo lugar en condiciones particularmente difíciles” en parte debido a “Malinterpretación de los contribuyentes sobre lo que se les pedía”.


En la primavera de 2023, cada propietario deberá actualizar los datos de su inmueble. O viven en el alojamiento, lo alquilan o el alojamiento está vacío. Pero ninguno de ellos dio explicaciones para esta campaña, afirma el Tribunal de Cuentas.



Además, el Tribunal de Cuentas señala la “Muchas situaciones concretas (…) mal previstas” como el de “múltiples propietarios” que poseen más de 200 propiedades, a menudo autoridades locales o propietarios sociales. Finalmente, el procedimiento quedó totalmente desmaterializado. ¿Qué causó? “una afluencia de solicitudes y viajes de usuarios a los centros tributarios en los últimos días de junio y los primeros días de julio de 2023”.


Resultado: la administración tributaria no pudo obtener datos fiables a tiempo y sólo 54,1 millones de los 71,4 millones de locales fueron identificados al final de la campaña. Por lo tanto, la DGFiP se vio obligada a implementar medidas de emergencia para acelerar la recopilación de información. Y pagar 20 millones de euros adicionales.


• Errores de recopilación


El punto culminante reside en estos errores en la recaudación de tres impuestos (el impuesto sobre la vivienda para segundas residencias, el impuesto sobre la vivienda sobre viviendas desocupadas y el impuesto sobre las viviendas desocupadas).


Bercy no tiene suficiente información”, más de un millón de contribuyentes han sido gravados indebidamente con el impuesto sobre la vivienda o el impuesto sobre las viviendas desocupadas”informa el Tribunal de Cuentas. Esto obligó a la administración a “conceder reducciones muy significativas, por valor de más de 1.300 millones de euros, equivalentes al 34% de la recaudación de estos impuestos en 2023”calculó el Tribunal de Cuentas.



Este último recomienda pues al Estado que establezca “todos los esfuerzos (…) para garantizar que una pérdida de esta magnitud no vuelva a ocurrir en 2024”.