Huracán Milton, tifón Yagi, inundaciones en Valencia… Los desastres climáticos costarán más de 200 mil millones de dólares en 2024

Más allá de su costo humano, los desastres climáticos tienen un costo financiero desastroso. Según un informe de la ONG Christian Aid, en el año 2024 diez fenómenos meteorológicos extremos costarán cada uno más de 4.000 millones de dólares.


Según un informe publicado este lunes 30 de diciembre por la ONG Christian Aid, los diez fenómenos meteorológicos extremos más destructivos de 2024 representaron costes acumulados muy por encima de los 200 mil millones de dólares. Cada uno de estos desastres climáticos tuvo un impacto de más de 4 mil millones de dólares.



Estas estimaciones representan una evaluación mínima, especifica la organización. Se basan únicamente en pérdidas aseguradas, y es probable que los costos financieros reales sean mucho más altos.


Fue Estados Unidos el que pagó el precio más alto: el número de muertos por el huracán Milton, que azotó la costa de Florida en octubre, fue de 25 y sus daños ascendieron a 60 mil millones de dólares. El huracán Helene, que azotó Estados Unidos, Cuba y México en septiembre, le siguió con 232 muertes y daños por 55.000 millones de dólares.


Ninguna región se salva


Este año ninguna región del mundo se ha librado de devastadores desastres climáticos. Las inundaciones en China mataron a 315 personas y costaron 15.600 millones de dólares.


El tifón Yagi, que azotó el suroeste de Asia el 2 de septiembre, asolando Filipinas, Laos, Myanmar, Vietnam y Tailandia, causó más de 800 muertes y provocó deslizamientos de tierra, inundaciones y daños a cientos de miles de viviendas y tierras agrícolas, en total. Costó 12.600 millones de dólares.



Europa sufre tres de las diez catástrofes más costosas: la tormenta Boris, que azotó en septiembre la República Checa, Eslovaquia, Polonia, Austria y Rumanía, dejó 26 muertos y costó 5.200 millones de dólares. Las inundaciones en Baviera a principios de junio mataron a seis personas y costaron 4.450 millones de dólares. En cuanto a las inundaciones en Valencia, España, fueron responsables de 226 muertes y costaron 4.220 millones de dólares.


«Señal de alarma»


Si los diez países citados por Christian Aid son países ricos es sobre todo porque tienen “mayor valor inmobiliario” y puedo contratar un seguro. Sin embargo, precisa la ONG en su informe anual, “algunos de los fenómenos meteorológicos extremos más devastadores han afectado a los países más pobres, que han contribuido poco a la crisis climática y tienen recursos más limitados para afrontarla”.



“Este informe nos recuerda que no se puede ignorar el cambio climático y que empeorará a menos que hagamos algo para detenerlo. Los políticos que restan importancia a la urgencia de la crisis climática sólo están dañando a su propio pueblo y causando un sufrimiento incalculable en todo el mundo».concluye Joanna Haigh, profesora emérita de física atmosférica en el Imperial College de Londres. “El impacto económico de estos fenómenos meteorológicos extremos debería ser una llamada de atención. »