La Fiscalía Nacional de Hacienda solicitó, el miércoles, un proceso penal, en particular por corrupción y tráfico de influencias, contra la ministra de Cultura, Rachida Dati, y el exjefe del grupo automovilístico Renault-Nissan, Carlos Ghosn, indicó el Ministerio Público. Viernes 15 de noviembre.
Ambos cuestionan las acusaciones. Rachida Dati es sospechosa de haber recibido 900.000 euros de RNBV, filial de la alianza Renault-Nissan, sin compensación por un trabajo real, entre 2010 y 2012, cuando era abogada y diputada europea (2009-2019), lo que podría haber servido para ocultar la actividad de lobby en el Parlamento Europeo. En este caso, Carlos Ghosn es objeto desde abril de 2023 de una orden de detención internacional.
En detalle, el PNF confirmó haber solicitado un juicio contra Rachida Dati por encubrimiento de abuso de poder y abuso de confianza, corrupción y tráfico pasivo de influencias por parte de una persona investida de un mandato público electivo en una organización internacional, el Parlamento Europeo.
“Una acusación es sólo la visión de la fiscalía”
“Una acusación es sólo la visión de la fiscalía de un caso. No refleja la realidad. Si bien se han aportado todas las pruebas de la inocencia de Rachida Dati, esta acusación va en contra de todos los elementos, testimonios, piezas y documentos aportados.Los abogados de Rachida Dati reaccionaron ante “New Obs”. “Se abre ahora un plazo legal durante el cual responderemos punto por punto para contrarrestar esta visión fragmentada e inexacta”aseguró Mes Olivier Baratelli y Olivier Pardo.
La Ministra de Cultura, por su parte, denunció una “acusación infame” Y «chocante». En un comunicado de prensa, menciona un “instrumentalización de este asunto por parte de sus oponentes políticos en desprecio de todos los principios” y se asegura de afrontar “esta nueva prueba con serenidad y determinación”.
El Ministro de Cultura, que también fue Guardián de los Sellos, considera prescritos estos hechos y ya ha aumentado el número de recursos en este sentido para poner fin a la acusación. En vano. Carlos Ghosn es objeto de una orden de arresto internacional desde abril de 2023. Se arriesga a ser juzgado por abuso de poder por parte de un director de empresa, abuso de confianza, corrupción y tráfico activo de influencias, en un caso en el que la empresa Renault se ha convertido en parte civil.
El hombre, de nacionalidad libanesa, francesa y brasileña, fue detenido a finales de 2018 en Japón, donde iba a ser juzgado por presunta malversación de fondos cuando estaba al frente del grupo Renault-Nissan. Encontró refugio en el Líbano a finales de 2019 después de una increíble fuga de Japón. Sus abogados no estuvieron disponibles de inmediato para hacer comentarios.
La decisión final sobre la celebración de un posible juicio corresponde a los jueces de instrucción responsables del caso, y el PNF precisa que aún está pendiente un recurso de apelación ante la sala de instrucción del Tribunal de Apelación de París.