Arabia Saudita: 338 ejecuciones en 2024, cifra récord


Arabia Saudita anunció este miércoles 1 de enero la ejecución de seis iraníes condenados a muerte por tráfico de drogas, después de un año marcado por un récord de 338 ejecuciones, según un recuento de la AFP basado en datos oficiales.


Los seis iraníes fueron ejecutados en Dammam, al este del reino, por “hachís de contrabando” en Arabia Saudita, indicó el Ministerio del Interior en un comunicado publicado por la agencia oficial SPA, sin precisar la fecha de la ejecución.


En 2024, 117 personas fueron ejecutadas por tráfico de drogas en el país, entre ellas 85 extranjeros, según un recuento de la AFP.


Las autoridades sauditas lanzaron una campaña para combatir las drogas en 2023, con una serie de redadas y detenciones. La monarquía conservadora del Golfo es un mercado importante para el captagón, una anfetamina producida en Siria y el Líbano, según la ONU.



Las ejecuciones de traficantes han aumentado allí desde el fin de una moratoria sobre este delito hace dos años.


El doble de ejecuciones que en 2023


En 2024, Arabia Saudita ejecutó a 338 personas, según el recuento de la AFP, frente a las 170 del año anterior.


Según Amnistía Internacional, que cuenta las ejecuciones en esta rica monarquía del Golfo desde 1990 tras una rigurosa aplicación de la ley islámica, las cifras anuales más altas hasta entonces fueron 196 ejecuciones en 2022 y 192 en 1995.


El reino es el país que ejecutó a más prisioneros en el mundo en 2023 después de China e Irán, según la ONG.


Entre las 338 personas ejecutadas en 2024 se encuentran 129 extranjeros, otro récord, entre ellos 25 yemeníes, 24 paquistaníes, 17 egipcios, 16 sirios, 14 nigerianos, 13 jordanos y siete etíopes. También fueron ejecutados sudaneses, indios, afganos, un esrilanqués, un eritreo, un bangladesí y un filipino. La mayoría habían sido condenados por tráfico de drogas.


Más de treinta organizaciones árabes e internacionales de derechos humanos denunciaron en septiembre la “fuerte aumento” ejecuciones de condenados por casos de drogas, mientras que la ONU había llamado, en 2022, a las autoridades saudíes a “poner fin a la aplicación de la pena de muerte en estos casos”.



Arabia Saudita ha llevado a cabo más de 1.000 ejecuciones desde que el rey Salman llegó al poder en 2015, según un informe de la organización contra la pena de muerte Reprieve, con sede en Londres, y la ONG Organización Saudita Europea para los Derechos Humanos (ESOHR), con sede en Berlín. publicado a principios de 2023.


En marzo de 2022, 81 personas fueron ejecutadas en un solo día por “crímenes terroristas”provocando una ola de indignación internacional.


Contrariamente a las afirmaciones del príncipe heredero


La aplicación de la pena de muerte por parte de Riad es criticada periódicamente por grupos de derechos humanos que la consideran excesiva y fuera de sintonía con los esfuerzos del reino por presentar una imagen moderna y reformista a nivel internacional.


Un número tan elevado de ejecuciones en 2024 contradice las declaraciones del príncipe heredero y líder de facto de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman, que aseguró en 2022 a la revista estadounidense “The Atlantic” que su reino había eliminado la pena de muerte, excepto para los criminales o individuos que ponen vidas en peligro.



Según Riad, la pena de muerte es necesaria para “mantener el orden público” y sólo se aplica si “los acusados ​​han agotado todos los recursos”.


Las relaciones diplomáticas entre Irán y Arabia Saudita, suspendidas desde hace siete años, se reanudaron en marzo de 2023 tras un acercamiento negociado bajo los auspicios de China.


En 2016, Arabia Saudita rompió relaciones con Irán después de un ataque a su embajada en Teherán y su consulado en Mashhad por parte de manifestantes que protestaban por la ejecución del clérigo chiita saudí Nimr al-Nimr en el reino.